A continuación reproducimos una carta que nos remite una persona afiliada (y que compartimos en su totalidad):

“Tengo la necesidad de mandar una sugerencia y tiene que ser a través de SIC, ¿dónde la mando, a Gestión Comercial, Mejora de Eficiencia? ¿Me contestarán con enlace normativa, si es que tienen a bien contestarme? o quedará en el olvido. Prefiero mandar una carta «abierta», para quienes pueda interesar, para las personas que lo viven, para quien se vea reflejado… y para los responsables de la Entidad, que son los que deben actuar.

Buenos días:

Quiero transmitirles el día a día que se vive en una oficina de un barrio obrero de Zaragoza. Un barrio obrero en su mayor parte ya envejecido, como muchos otros barrios y pueblos, con una población de avanzada edad que ha sido quien ha ayudado a esta Entidad a estar donde está.

Clientes y clientas a quienes atendemos como a nadie nos gustaría que se nos atendiese al llegar a esa edad, y con un cambio digital y tecnológico abrumador y «peligroso» para este Sector.

Y ese déficit de atención y de «ayuda» no es porque la Plantilla de esta entidad no sepamos gestionar nuestro tiempo, que SI que lo sabemos. Lo gestionamos a la perfección, pero si algo nos falta es eso: TIEMPO… y si algo nos sobra es CALIDAD en la atención, que no podemos ofrecer a nuestros mayores, porque esta empresa se está subiendo «al carro»  para echarles de las oficinas a marchas forzadas.

Esa población, ha colaborado con sus nóminas, préstamos, ahorros… a ser uno de los pocos bancos que sobrevivimos en el sector. Éramos SU CAJA DE AHORROS (hoy su BANCO).

Personas que nos necesitan, precisan que les demos servicio, tiempo, calidad en la atención. Pero eso es imposible, con plantillas cada vez más menguadas y con una presión comercial voraz y desmedida.

La Entidad les ignora, no les tiene en cuenta, piensa que con no cobrarles el correo, o la emisión de nueva libreta, tienen que estar agradecidos a IberCaja.

Porque otros Bancos lo hagan no tenemos que hacerlo nosotros también. Podemos ser «diferentes», acompañarles, ayudarles, apoyarles…nos ayudaron y ahora les “damos la patada”. Mal mensaje para la clientela actual y futura.

Qué buena excusa es el Covid, sirve para todo, especialmente para defender la postura de la Entidad ante situaciones de este tipo: «El Covid adelantó el avance digital», «Hay que adaptarse y digitalizarse por otro posible Covid o similar»…, hay más, pero para qué plasmarlas, todos las hemos oído o, incluso, hasta las hemos llegado a pronunciar.

Si algo diferenciaba a IberCaja era su CALIDAD en la atención, no «Vamos» a crear productos nuevos, no somos tan innovares, cuando otros lo hacen nosotros les seguimos.

¡SEAMOS DIFERENTES! Mejoremos para ayudar a nuestros mayores. Alguien dirá que una oficina no es la Obra Social de IberCaja, pues sí, llevemos esa Obra Social a las oficinas, NOS NECESITAN y, si lo hacemos bien, ellos y sus familias lo terminarán reconociendo.

No tengo que ser yo quien de las ideas, para eso están ustedes, en sus despachos (o en sus hogares “teletrabajando”, pero tengan la certeza de que en las oficinas se necesitan Personal, Medios y Tiempo, para no dejar de lado a este colectivo.

Lo dicho, ¡SEAMOS DIFERENTES!… Y MEJORES.”